Solo en compañía

la carne cubre el hueso
y ponen un cerebro
y a veces
también un alma allí dentro,
y estrellan las mujeres
jarrones contra la paredes
y los hombres beben
demasiado
y nadie encuentra
a ese alguien
pero siguen
buscando
metiéndose en camas
ajenas.
la carne cubre
el hueso y
la carne busca
algo más que
la carne.


no hay ni una
sola
opción:
estamos todos atrapados
por un destino
singular.

nadie encuentra jamás
a ese alguien.

se llenan los vertederos
se llenan los desguaces
se llenan los manicomios
se llenan los hospitales
se llenan los cementerios

nada más
se llena.

Charles Bukowski (traducción de Paula Zumalacárregui Martínez)